Agronomia Tropical. 28(1): 2-18
Fecha de Recepción: 16-8-77
El mango (Mangifera índica l.) y el aguacate (Persea americana Mill) constituyen unos de los frutales más difundidos en el país, ocupando respectivamente una superficie de 6.102 y 12.457 hectáreas bajo cultivo (MAC. 1975). Tomando en consideración los lineamientos del Plan Frutícola Nacional tendientes a la intensificación y el aumento inmediato de las plantaciones existentes en las regiones donde está comprobada la adaptabilidad y rendimiento de las especies allí cultivadas (ARAQUE. 1973), se hace necesario, incrementar la información básica para su implementación.
En la Estación Experimental de Guanipa desde 1965, se ha venido realizando la introducción, estudio y selección de variedades a fin de orientar las nuevas plantaciones comerciales. El presente estudio tuvo como finalidad determinar el status nutricional así como otras informaciones como la distribución radicular indispensables para el establecimiento de futuros proyectos de fertilización.
La introducción, estudio y selección de variedades de estas especies frutales fue iniciada hace 12 años en la Estación Experimental de Guanipa, con 35 variedades de mango y 20 variedades de aguacate. Las variedades que han presentado mayores posibilidades para el cultivo comercial, han sido en el mango: Rosa, Bocado, Smith, Harris Sdg y Tommy-Atkins. Para el aguacate son la Booth-1, Nelan, Simmonds, Pollock, Russell, Fairchild, Fuchsia, Santa Ana, Hall y Cook (M.A.C. 1973).
Estudio sobre nutrición y fertilización de estos cultivos en el país son escasos, AVILAN (1971, 1974) y AVILAN y FIGUEROA (1977) en mango, reportan resultados sobre las variaciones en las hojas de los elémentos (N. P. K y Ca) a través de un ciclo de producción y la respuesta a la fertilización nitrogenada observadas en suelos de la serie Maracay (orden Mollisoll) en la zona Central del país.
Estos resultados señalan que los períodos de floración o inicio de formación de los frutos son los períodos más críticos dentro del ciclo de producción. Así mismo para estos suelos, la aplicación de 80 KgN/ Ha, 30 - Kg/ P2 O5 /Ha y 30 Kg/K2 O/Ha en árboles en plena producción de las variedades KENT y SMITH incrementaban los rendimientos en un 50% con respecto al testigo (sin fertilizar). Un contenido foliar alrededor de 1.3% de nitrógeno determinado en hojas fisiológicamente maduras (3era o 4 hoja) en brotes que no estén en crecimiento ni en floración durante la época de plena floración, se considera "adecuado" En relación a la época de aplicación de fertilizante nitrogenado (antes, durante y después de floración) no se observaron diferencias significativas en los rendimientos, siendo esto motivado al gran desarrollo radicular que en estos suelos presenta el cultivo (AVILAN 1974).
En aguacate AVILAN y FIGUEROA (1973 - 1977), reportan los resultados obtenidos en una evaluación del status nutricional mediante el análisis foliar de las variedades del huerto de Introducciones del CENIAP, donde se evidenciaba que el potasio era el elemento limitante en la obtención de altos rendimientos, así como también la respuesta observada a la fertilización con potasio del cultivo en estos suelos.
WOLFE et al (1969) establecen de acuerdo a algunas experiencias, que, los niveles adecuados para el mango de los elementos mayores, según el análisis foliar, tomando como base hojas de 6 mesas de edad son los siguientes: 1,2 a 1,4% de N. 1.0 a 1.2% de K, 0.3 a 0.6% de Mg y 0.1 a 0.2% de P. Para el cultivo del aguacate, EMBLETON y JONES (1966) establecieron los niveles para los diferentes elementos, los cuales de acuerdo a los resultados obtenidos por AVILAN y FIGUEROA (1977) se adaptaron bien a nuestras condiciones.
La región, de acuerdo a EWEL y MADRID (1968), pertenece al
Bosque Seco Tropical, con una vegetación típica de la sabana y presentando una elevación aproximada de 270 m.s.n.m., caracterizada por una estación lluviosa, concentrada en los mesas de mayo a diciembre con un promedio anual de 1.100 mm y una temperatura media anual de 25 °C. LUQUE y TENIAS (1974) mapearon varias unidades de suelo, siendo las de mayor ocurrencia en la zona del presente estudio, las designadas como Guanipa 1 (Typic Paleustults) Guanipa 2 (Arenic Haplustox) y Guanipa 3 (Typic Haptustox). En general son suelos de textura arenosa, desaturados, de capacidad de intercambio de baja a muy baja y las arcillas son de tipo caolinítico (LUQUE, 1975). Desde el punto de vista de fertilidad, las tres unidades de suelo presentan las mismas limitaciones, caracterizada por su pobreza en elementos nutritivos (LUQUE y AVILĂN, 1976).
Se realizó el muestreo en mango de 68 árboles adultos (10 a 11 años de edad) de las variedades Haden, Sensation, Zill, Kent, Tommy-Atkins, Springfels, Manzana, Irwin, Bocado, Manga Criolla, Carrie, Sandersha, Rosa, Fresa, Yulie, Canfor y Graham. En aguacate se efectuó en 20 árboles de las variedades Pollock, Russell, Fuchisa, Farchild, Cook, Hall, Prince, Lula, Taylor, Booth-1 y linda, del huerto de introducciones de variedades de la Estación Experimental de Guanipa.
Las variedades de ambos cultivos se encuentran injertadas sobre un patrón común, siendo para el mango el criollo "Hilacha" y para el aguacate un tipo criollo de la raza antillana. Los huertos fueron plantados utilizando el trazado en cuadro y con una distancia de siembra de 12 m para el mango y 8 m para el aguacate.
Para la fertilización de los huertos, desde hace varios años, se ha venido aplicando la fórmula 12-24-12, empleándose en la actualidad para el mango 6 Kg/planta/año, en forma faccionada (1 1/2 Kg por aplicación) durante los mesas de enero, abril, julio y octubre. En aguacate, se empleo la misma fórmula a razón de 5 Kg/planta/año en forma fraccionada (1 1/4 Kg por aplicación) durante los mismos mesas antes citados.
La técnica de muestreo foliar empleada para el mango, fue la establecida por KENWORTHY (1964), realizándolo en hojas maduras fisiológicamente, de brotes que no estaban ni en crecimiento ni en floración, en la etapa de plena floración del cultivo. En el aguacate se tomaron hojas maduras fisiológicamente (pecíolo + limbo) en brotes normales y recientes. Para ambos cultivos, en el muestreo se tomaron unas 20 hojas de la parte media y alrededor de toda la cope, para cada uno de los árboles considerados.
Las muestras foliares fueron analizadas luego de molidas y secadas en estufa a 70 °C. Empleándose para la determinación de el nitrógeno el método de Kjeldhal. Por combustión húmeda nítrica - perclórica y en el extracto se determinaron, el Fósforo por fotoclorimetría usando el reactivo del vanadato molibdato de amonio, el potasio por fotometría de llama y los elementos Calcio y Magnesio por el método del EDTA. Se realizó un muestreo de suelo con fines de fertilidad a diferentes profundidades los cuales fueron analizados de acuerdo a la metodología establecida por el laboratorio de Suelos del CENIAP (CHIRINOS et al 1977).
Observaciones complementarias como obtención de los rendimientos expresados en número de frutas y peso de fruto por planta, así también otros aspectos como la apariencia general de los árboles, fueron realizados a objeto de obtener una visión más complete del desenvolvimiento de los cultivos en la región.
Los resultados promedios por variedad del análisis foliar, efectuados en el mango se presentan en el Cuadro 1, expresados en por ciento de materia seca a 70 °C, así como también los rendimientos promedios (número y peso de frutos por planta) y el período de cosecha de las mismas.
De acuerdo a los mismos, puede apreciarse que los niveles de Nitrógeno variaron entre 1.57% y 1.02% con un promedio general de 1.32% el cual se considera en el mango dentro del mango de "adecuado". En general en la zona es común observar la deficiencia de este elemento, presentando las plantas una coloración amarillenta y poco desarrollo. Análisis foliares realizados en estas plantas deficientes presentaron un tenor de 0.69% de este elemento.
Los niveles de fósforo en general son bajos, variando entre 0,05% y 0.10%, con una media general de 0,08%, nivel que de acuerdo a WOLFE et al (1969) se encuentra por debajo del establecido como "adecuado" (0,1% a 0,2%).
SEN et al (1974) citado por EMBLETON y JONES (1966) determinó en plantas de mango Langra, cultivados durante 6 años en un media carente de fósforo, que los niveles foliares eran de 0,09%. Por otra parte ROY y et al (1951) tomando como base, la pequeña disminución de los contenidos de fósforo en el suelo, constatada a través de análisis de suelo en diferentes períodos, concluye, que el mango es un cultivo poco exigente en este elemento.
Tomando en consideración la pobreza de estos suelos en este elemento (ver Cuadro 2) y sus características mineralógicas (arcillas del tipo caolinítico) se observe, que a pesar del nivel de fertilización fosforada aplicado, es poco aprovechable por la planta debido a la poca distribución radicular que presenta el cultivo en las capes superficiales en estos suelos, la cual se discute mas adelante.
Los tenores de potasio variaron entre 0,44%y 0,97% con una media general de 0.62% . Estos niveles de acuerdo a WOLFE et al (1969) son bastante bajos, el cual considera "adecuado" entre 1,0%a 1,2%. AVlLAN (1974 - 1977) reporta rendimientos promedios de 860 frutos/ planta y 350 Kg/planta obtenidos en ensayos de campo durante varios años, considerándose bastante satisfactorios, con las variedades Kent, Smith y Zill, donde los niveles foliares del potasio variaron alrededor de 0.4%.
Variedades |
Elementos expresados en % de materia seca a 70 șc |
Rend. Promedios |
Epoca de cosecha |
|||||
|
N |
P |
K |
Ca |
Mg |
N ș-F/Arbol |
KgF/Arbol |
|
Sandersha |
1,36 |
0,09 |
0,70 |
1,61 |
0,24 |
431 |
100 |
junio - sept. |
Haden |
1,32 |
0,07 |
0,59 |
2,33 |
0,28 |
290 |
177 |
agost. -octu. |
Julie |
1,57 |
0,10 |
0,75 |
0,70 |
0,24 |
242 |
69 |
mayo -sept. |
Irwin |
1,20 |
0,07 |
0,63 |
1,41 |
0,35 |
550 |
218 |
junio-octu. |
Sensation |
1,02 |
0,05 |
0,65 |
1,73 |
0,28 |
220 |
180 |
junio-novi. |
Zill |
1,15 |
0,08 |
0,53 |
1,15 |
0,34 |
411 |
146 |
mayo-octu. |
Bocado |
1,36 |
0,08 |
0,97 |
0,81 |
0,34 |
799 |
97 |
mayo-juli. |
Manga Criolla |
1,25 |
0,09 |
0,63 |
1,31 |
0,22 |
618 |
161 |
mayo-sept. |
Rosa |
1,49 |
0,10 |
0,78 |
1,32 |
0,24 |
482 |
138 |
mayo-agos. |
Graham |
1,24 |
0,08 |
0,45 |
1,37 |
0,35 |
304 |
150 |
junio-novi. |
Fresa |
1,41 |
0,08 |
0,46 |
1,85 |
0,22 |
687 |
116 |
mayo-octu. |
Carrie |
1,48 |
0,08 |
0,51 |
1,1 2 |
0,18 |
374 |
116 |
mayo-sept. |
Manzana |
1,13 |
0,07 |
0,48 |
1,91 |
0,31 |
622 |
220 |
junio-octu. |
Canfor |
1,28 |
0,09 |
0,68 |
0,73 |
0,23 |
318 |
125 |
mayo-juli. |
Kent |
1,42 |
0,09 |
0,72 |
1,36 |
0,35 |
207 |
138 |
julio-novi. |
Tommy Atkins |
1,42 |
0,07 |
0,44 |
1,64 |
0,34 |
221 |
116 |
agos.-octu |
Springfels |
1,43 |
0,07 |
0,59 |
1,91 |
0,24 |
166 |
125 |
juli-octu. |
Muestras de Otros Huertos |
0,69 |
0,06 |
0,23 |
1,98 |
0,22 |
|
|
|
Media |
1,32 |
0,08 |
0,62 |
1,41 |
0,28 |
426 |
140 |
|
Desvia. Standard de la Media |
1,51-1,13 |
0,10-0,06 |
0,86-0,38 |
2,03-0,79 |
0,37-0,19 |
|
|
|
{*} = analisis realizados por el Laboratorio de Suelos del Instituto de Investigaciones Agricolas Generales del Ceniap - Fonaiap.
|
Muestras y profundidad |
|||||
Análisis |
1 |
2 |
3 |
4 |
5 |
6 |
|
0 - 15 |
15 - 40 |
0 -20 |
20-40 |
0?30 |
30 -60 |
Textura |
Arenosa |
Franco Arenosa |
Arenosa |
Arenosa |
Arenosa |
Franco Arenosa |
Fósforo ppm (1) |
2 |
2 |
4 |
4 |
2 |
1 |
Potasio ppm (1) |
28 |
20 |
32 |
24 |
32 |
28 |
Calcio ppm (2) |
20 |
20 |
52 |
54 |
40 |
16 |
Nitratos ppm |
12 |
6 |
15 |
7 |
9 |
8 |
Mat. Org.. % |
0,77 |
0,58 |
0,60 |
0. 47 |
0,90 |
0. 77 |
Ph 1:2,5 en agua |
5,1 |
4,9 |
5,5 |
5,4 |
5,5 |
5,6 |
(1) = Fósforo y potasio extraídos con NaHCO3 0,5M y pH 8.5 relacion relacion suelo estractora 1:20.
(2) = Calcio Y Nitratos Extraídos con CH3COONa 0.125 M Y pH 4.2 . Relacion Suelo Estractora 1:2.
SMITH y SCUDDER (1952) en soluciones nutritivas con las variedades Haden y Zill para el tratamiento sin potasio, reporta un nivel de 0,25% y para el tratamiento complete 0,97% en hojas de 6 mesas de edad. Sen et al (1974) citado por EMBLETON y JONES (1966) en mango Langra, reporta niveles de 0.29% para el tratamiento menos potasio y 0.63% para el tratamiento fertilizado con NPK.
Los análisis de suelo (Cuadro 2) reportan un bajo contenido de este elemento en los suelos, por lo cual se considera que el nivel de fertilización empleado es satisfactorio, tomando en consideración los niveles de producción.
El calcio varió entre 0,73%y 2,33% con una media de 1.41%. SMITH y SCUDDER (1952) reportan para plantas cultivadas en soluciones carentes en este elemento un nivel de 0.37% y para el tratamiento completo un nivel de 0.97% . Los suelos de la región se caracterizan en general por poseer bajos contenidos de este elemento (Cuadro 2). Sin embargo problemas de "Soft-nose" no han sido detectados a pesar del bajo contenido de calcio y el programa de fertilización que se está aplicando.
SMITH y SCUDDER (1952) reportan que la deficiencia del magnesio ocurre cuando el nivel foliar es de 0.09% . Los niveles encontrados variaron entre 0.18% y 0.35% con una media general de 0.28% . Por otra parte, MALO (1966) señala que el magnesia no es tan crítico para el mango y el aguacate como lo es para algunos cítricos.
SMITH y SCUDDER (1952) manifiesta que una de las causes por la cual el mango difícilmente presenta síntomas de deficiencias nutricionales es motivado a poseer un muy eficiente sistema de absorción radicular. Observaciones sobre la distribución radicular del mango en estos suelos fueron realizados (AVILAN, 1972) empleando el método de la "Trinchera" descrito por KOLESNIKOV (1971) cuyos resultados se reportan a continuación.
En el Cuadro 3 y el Gráfico 1 puede observarse que la mayor concentración radicular lateral, especialmente de las raíces de diámetro inferior a 0.5 cm. se ubican a 1.5 m. del bronco. A las distancias laterales de 3 m y 4.5 m del bronco, las concentraciones decrecen en el mismo sentido, siendo contabilizados 241 y 226 raíces respectivamente, destacándose la ausencia de raíces gruesas (entre 2 cm. de diámetro) en el perfil mas alejado.
En el sentido vertical se determinó que la mayor concentración radicular se ubica entre los 30 cm. y 90 cm. de profundidad, característica común para las diferentes distancias laterales muestreadas. A pesar de que la textura no varía a través del perfil (textura arenosa) se observe sin embargo, que la distribución de las partículas mas fines del suelo presentan una pequeña variación que puede ser la cause de la misma.
Los contenidos de limo y arcilla entre los 30 cm. y 120 cm. de profundidad se incrementan notablemente en el perfil alcanzando su mayor volumen alrededor de los 90 cm. Existiendo en estos estratos una mayor capacidad de retención de humedad en comparación a otros estratos del perfil del suelo el desarrollo radicular sera mayor, tomando en consideración el manejo del cultivo (sin riego) y las características pluviométricas de la región.
Las raíces de mayor grosor (mayores de 2 cm.) se encuentran localizadas muy cercanas al bronco, dirigidas hacia abajo con una ángulo de 45 ° con respecto a la superficie del suelo. De igual forma se observó que algunas raíces de grosor intermedio (entre 2 cm. y 0.5 cm.) se dirigían de los estratos intermedios hacia la superficie donde se ramifican.
Las tendencias observadas en las raíces de mayor grosor, se podría explicar en función de la obtención de agua (hidroptropismo) de las capas mas profundas del suelo. En el segundo case, METRO y BEAUCORPS. (1958) en poblaciones de Eucaliptos (Eucalyptus camuldulensis) en suelos arenosos de Rharb, observaron esta misma tendencia, señalando la intensa exploración que realizan las raíces de la superficie humífera del suelo. En nuestro case, debe señalarse como cause la práctica de la fertilización que se emplea (localización del abono superficialmente). HENIN et al (1972) menciona que las raíces no manifiestan hablando con propiedad "quimiotropismo" en el sentido de que no son atraidas por un horizonte enriquecido, pero en él, se desarrollan más abundantes.
Los bajos niveles de fósforo observados en las plantación pueden ser debidos al bajo volumen radicular superficial y la alto capacidad de fijación de este elemento por estos suelos, a pesar de la eficiencia radicular del cultivo señalada por SMITH y SCUDDER (1952).
Los rendimientos en general variaron entre 166 a 799, con una media de 426 frutos por planta y entre 69 a 220 con una media de 140 Kg/ planta. Las variedades que más se destacan por sus rendimientos son: Haden, Irwin, Sensation, Manga Criolla y Manzana. Tomando como base los rendimientos observados para estas mismas variedades en el huerto de Introducciones del Centro Nacional de Investigaciones Agropecuarias (CENIAP, 1977) ubicado en la región Central del País. Los mismos son marcadamente inferiores.
En el Cuadro 4 se presentan los resultados del análisis foliar realizado en once variedades de aguacate. Los niveles de nitrógeno variaron entre 1.49% y 2.04% con una media general de 1.86% . EMBLETON y JONES (1966) establecen "adecuado" entre 1.6% y 2.0%, encontrándose los valores obtenidos dentro del rango, a excepción de la variedad Lula (1.49% ) la cual presentó además el tenor más elevado de potasio (1.14%). LACCEUILHE et al (1968) observó la tendencia de incrementarse los niveles de potasio en las hojas de plantas carentes en nitrógeno.
|
Distancias al tronco |
|||||||||||||||||||||||
|
50 cm |
1,5 m |
3.0 m |
4,5 m |
||||||||||||||||||||
|
Diámetro radicular (cm) |
Diámetro radicular (cm) |
Diámetro radicular (cm) |
Diámetro radicular (cm) |
||||||||||||||||||||
Profundidad (cm) |
>2 |
2-0,5 |
<0,5 |
>2 |
2-0,5 |
<0,5 |
>2 |
2-0,5 |
<0,5 |
>2 |
2-0,5 |
<0,5 |
||||||||||||
|
n ° |
% |
n ° |
% |
n ° |
% |
n ° |
% |
n ° |
% |
n ° |
% |
n ° |
% |
n ° |
% |
n ° |
% |
n ° |
% |
n ° |
% |
n ° |
% |
0-12 |
0 |
- |
0 |
16,6 |
36 |
19,8 |
0 |
- |
0 |
- |
37 |
12,7 |
0 |
- |
0 |
- |
47 |
19.8 |
0 |
- |
0 |
- |
68 |
30 |
12-30 |
0 |
- |
1 |
16,6 |
31 |
17,1 |
0 |
- |
2 |
50,0 |
43 |
14,8 |
0 |
- |
2 |
50,0 |
24 |
10,1 |
0 |
- |
0 |
- |
42 |
18,5 |
30-50 |
3 |
42,8 |
1 |
16,6 |
33 |
18,2 |
0 |
- |
4 |
|
62 |
21,3 |
0 |
- |
1 |
25,0 |
73 |
30,8 |
0 |
- |
0 |
- |
40 |
17,6 |
50-90 |
2 |
28,5 |
1 |
16,6 |
23 |
12,7 |
0 |
- |
4 |
25,0 |
95 |
32,7 |
0 |
- |
1 |
25,0 |
77 |
32,4 |
0 |
- |
0 |
- |
49 |
21,6 |
90-120 |
1 |
14,2 |
1 |
- |
19 |
10,4 |
0 |
- |
0 |
- |
24 |
8,2 |
0 |
- |
0 |
- |
9 |
3,8 |
0 |
- |
0 |
- |
15 |
6,6 |
120-145 |
0 |
- |
0 |
- |
9 |
4,9 |
0 |
- |
0 |
- |
7 |
2,4 |
0 |
- |
0 |
- |
4 |
1,6 |
0 |
- |
0 |
- |
12 |
5,3 |
145-170 |
1 |
14,2 |
2 |
33,3 |
25 |
13,8 |
0 |
- |
0 |
- |
22 |
7,5 |
0 |
- |
0 |
- |
3 |
1,2 |
0 |
- |
0 |
- |
0 |
- |
170+ |
0 |
- |
0 |
- |
5 |
2,7 |
0 |
- |
0 |
- |
|
- |
0 |
- |
4 |
- |
237 |
- |
0 |
|
0 |
|
226 |
- |
n °raices |
7 |
|
6 |
|
181 |
0 |
|
|
4 |
|
290 |
|
|
|
|
|
241 |
|
|
|
|
|
226 |
|
total |
|
|
|
|
194 |
|
|
|
|
|
294 |
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Los tenores de fósforo variaron entre 0,08 y 0.11% con una media de 0.09%. El potasio presentó una variación entre 0.51%y 0.98% siendo la media general de 0.74~ Calcio y magnesia de igual forma que los anteriores elementos , presentaron tenores que se encuentran dentro de los rangos establecidos como adecuados por EMBLETON y JONES (1966). Se observe sin embargo, durante el período seco de la región, un desecamiento de las hojas en su punta y en cases severos se afecta gran parte de la lámina, lo cual puede estar asociado a la aplicación del fertilizante durante la misma época. La falta de un adecuado sistema de riego y la alta susceptibilidad de las raíces del aguacate a las altos concentraciones salines, señaladas por JACOB y UEXKULL (1964), pueden ser la cause del problema. Por lo cual sería recomendable incrementar el número de aplicaciones, reduciéndose así la cantidad de fertilizante por aplicación.
El síntoma foliar antes descrito según RAZETO (1970) corresponde a lo causado por la toxicidad del cloro, señalando además, que el aguacate es muy poco tolerante a él mismo. Tomando en consideración que un alto porcentaje de las formulaciones que se emplean en Venezuela, utilizan como fuente de potasio, el cloruro de potasio, debe tenerse presente este elemento.
Los rendimientos observados en general son bastantes bajos, cuando comparados con los obtenidos en la región Central del País en las mismas variedades. Hecho asociado al poco e irregular desarrollo de la copa de los árboles, causado por los fuertes vientos que caracterizan la región, dada la topografía plana de la misma. Por ello es necesario el establecimiento de cortinas rompe vientos en la instalación de futuros huertos tomando en consideración la marcada sensibilidad a la acción mecánica del viento por este cultivo, lo cual también incide en la caída de un alto porcentaje de flores y frutos chicos (MORIN, 1967).
1) los niveles foliares determinados para los cultivos de mango y aguacate se encuentran en general ubicados entre los rangos considerados como "adecuados" por algunos autores.
2) los bajos rendimientos observados por los cultivos se deben entre otros factores; a la falta de un adecuado sistema de riego y la carencia de cortinas rompe vientos, afectando este último mas severamente el cultivo de aguacate.
3) En relación a la distribución radicular del mango en estos suelos, las mayores concentraciones radiculares determinadas fueron lateralmente a 1,5 m. del bronco y verticalmente entre 30 cm. y 50 cm. de profundidad, influyendo notablemente la variación textual de los suelos.
Variedades |
Elementos Expresados en % de Materia Seca A 70 șC. |
||||
|
N |
P |
K |
Ca |
Mg. |
Russell |
1,87 |
0,09 |
0,73 |
0,69 |
0,50 |
Booth-1 |
2,04 |
0,11 |
0,68 |
1,63 |
0,52 |
Lula |
1,49 |
0,09 |
1,14 |
0,31 |
0,36 |
Taylor |
1,76 |
0,08 |
0,51 |
1,93 |
0,65 |
Hall |
2,00 |
0,09 |
0,66 |
1,50 |
0,47 |
Cook |
1,95 |
0,09 |
0,58 |
0,71 |
0,56 |
Fuchsia |
1,87 |
0,10 |
0,98 |
1,26 |
0,38 |
Prince |
1,91 |
0,09 |
0,72 |
1,33 |
0,34 |
Fairchild |
1,77 |
0,09 |
0,50 |
1,67 |
0,83 |
Linda |
2,00 |
0,11 |
0,95 |
1,43 |
0,74 |
Pollock |
1,80 |
0,10 |
0,75 |
1,,25 |
0,35 |
Promedio General |
1,86 |
0,09 |
0.74 |
1,51 |
0,51 |
BIBLIOGRAFIA CITADA